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miércoles, 27 de abril de 2016

Buenas criaturitas del señor hoy os traigo uno de mi ultimo microcuento espero que os guste.

Tras años de búsqueda interrumpida, por fin encontré el cofre.

Dentro de el habría seguramente joyas y oro. Al lado de el había un gran dragón que estaba durmiendo con la llave del tesoro en ganchada a su cuello.

Intenté ir lo mas sigilosamente posible para no despertarlo. Llegué al lado de él, le quite la llave y salí corriendo. 

El dragón se despertó y me intentó echar fuego, lo esquivé a tiempo. Pero de repente con sus grandes alas se puso delante mía, me comió la pierna, pero con suerte pude salir de esa cueva con el tesoro.

Y como todos los piratas con una pierna de madera acabé.

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